El gobernador de Florida, Rick Scott, ha instado a los residentes ubicados en las zonas de evacuación a causa del huracán Matthew ―que azotó la zona del Caribe y se acerca a EE.UU.― a que abandonen inmediatamente sus hogares. «Si viven en una zona de evacuación, tienen que salir ahora», afirmó Scott, citado por CBS Miami. «Evacúen, evacúen, evacúen», insistió.

«Esto es serio. No se arriesguen. Un pequeño movimiento [del huracán] podría significar mucho. Por eso tenemos que prepararnos para un golpe directo. Así que de nuevo, si deben abandonar sus lugares y no lo han hecho, evacuen. Esta tormenta va a matarlos», agregó. «El tiempo se acaba. No nos queda mucho tiempo».

Rick Scott subrayó en su discurso que será una «tormenta catastrófica», sea un impacto directo o no. «No hemos tenido una tormenta así en la costa este durante mucho tiempo». A quienes se resisten a evacuar la zona, el gobernador les pidió pensar  en los que ya han muerto como consecuencia del fenómeno meteorológico.

El poderoso huracán pone en alerta a EE.UU.

Más de 2 millones de personas en los estados Georgia, Florida y Carolina del Sur fueron instados a abandonar sus hogares ante el acercamiento del poderoso huracán de categoría 3. En los tres estados ha sido declarada la emergencia.

«Los vientos extremos del huracán pueden hacer mucho daño y no solo en la costa», advirtió en la televisión nacional Rick Knabb, director del Centro Nacional de Huracanes. «Además de viento, podría haber mareas tormentosas».

Mientras se espera la llegada del huracán, en EE.UU. han sido cancelados casi 1.600 vuelos, mayormente en los aeropuertos de Miami, Orlando y Fort Lauderdale, ubicados en Florida. En ese estado han sido puestos en alerta 6.000 miembros de la Guardia Nacional y organizados diferentes refugios. Asimismo, se espera en la costa este un corte masivo de energía a causa de la tormenta.

«Si se encuentra en la costa este, se quedará sin energía. Millones se quedarán sin energía, posiblemente durante un largo periodo de tiempo», indicó Scott.

El huracán Matthew ya se cobró la vida de al menos a 69 personas y causó graves daños materiales tras su paso devastador por el Caribe.