Panamá, 6 Abr (Notimex).- La séptima Cumbre de las Américas se celebrará el viernes y sábado en esta capital, enfocada en temas de cooperación, y con la presencia por primera vez de Cuba en este tipo de foros luego de su acercamiento con Estados Unidos.

El cónclave, bajo los auspicios de la Organización de los Estados Americanos (OEA), se desarrollará con la presencia de jefes de Estado o sus representantes de los 35 países del continente, en el Centro de Convenciones Atlapa de la capital panameña.

Los temas de la reunión de dos días están centrados en establecer acciones concretas de cooperación intrarregional, pero el tema que atraerá la atención será la eventual reunión entre los presidentes de Cuba, Raúl Castro, y de Estados Unidos, Barack Obama.

Fuentes estadunidenses han confirmado que entre Obama y Castro solo habrá “una interacción” durante la cumbre, luego que ambos países anunciaron el 17 de diciembre pasado el inicio de un proceso para restablecer las relaciones rotas en 1961.

La eventual “interacción” entre Castro y Obama no será la primera toda vez que ambos mandatarios se estrecharon la mano en diciembre de 2013 en los funerales del expresidente sudafricano Nelson Mandela.

“Que por primera vez Cuba participe de una Cumbre de la OEA es una victoria, para el pueblo y gobierno de ese país, como para quienes hemos defendido el derecho de la autodeterminación frente al imperialismo norteamericano”, dijo el catedrático panameño Olmedo Beluche.

Para el grupo no gubernamental Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), esta etapa en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos abre nuevas oportunidades en los vínculos de los países latinoamericanos con la potencia norteña.

“Además de normalizar sus relaciones diplomáticas con Cuba, la acción ejecutiva sobre inmigración del presidente Obama y su pedido de ayuda de mil millones de dólares para Centroamérica han sido bien recibidos en la región”, indicó el WOLA.

En medio de la expectativa internacional por este encuentro, las autoridades locales afinan detalles para recibir a los mandatarios del continente, entre ellos Obama y Castro, de México, Enrique Peña Nieto; de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Argentina, Cristina Fernández, entre otros.

Más de 12 mil personas son esperadas por las autoridades para los días previos y durante la cumbre, por lo cual se han reforzado las medidas de seguridad en los alrededores de Atlapa, hoteles y la autopista que comunica el aeropuerto con la ciudad.

Unos cinco mil policías serán desplegados para la protección de los visitantes, además de que las autoridades de aeronáutica civil prohibieron el uso de drones en el territorio nacional durante los días de la cita continental.

El sector público y los colegios de la capital suspenderán actividades el viernes, mientras las empresas pararán sus actividades el sábado con el fin de facilitar la movilidad en las áreas donde se desarrollarán actos relacionados con el evento.

La reunión de presidentes tendrá como complementos foros de rectores, empresarios y de la sociedad civil para discutir temas que luego serán presentados a los mandatarios.

En forma paralela sesionará la Cumbre de los Pueblos, una reunión a la cual asistirán dirigentes de organizaciones de izquierda del continente, con la participación en el acto inaugural del cantante cubano Silvio Rodríguez.