Ciudad de México.- Autoridades de Los Ángeles arrestaron a Laquisha Jones, quien presuntamente agredió a Rodolfo Rodríguez, hombre mexicano de 91 años el 4 de julio.

Los detectives arrestaron a Laquisha Jones por la noche del martes, cerca de la calle 60 y Avenida Crenshaw, según el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles.

Jones, de 30 años, fue fichada como sospecha de asalto con un arma mortal, de acuerdo con Los Angeles Times.

A la sospechosa se le impuso una fianza de 200 mil dólares.

El ataque contra el anciano, registrado el pasado 4 de julio en Willowbrook, un suburbio del sur de Los Ángeles, fue tan brutal que Rodríguez no pudo caminar tras la agresión, que le dejo múltiples lesiones, incluyendo fractura de pómulo, costillas rotas y heridas en la cabeza y cuello.

Los investigadores aún investigan si hay más personas involucradas, de acuerdo con el Departamento del Sheriff. La investigación continúa y el motivo para el asalto «se desconoce en este momento», dijo el Departamento del Sheriff.

 

Donan más de 2OO mil dls para Rodolfo Rodríguez

En los últimos cuatro días se recaudaron más de 210 mil dólares en donativos para ayudar en los gastos médicos y para la recuperación de Rodolfo Rodríguez.

El nieto de Rodríguez, Erick Mendoza, abrió una página en GoFundMe, el sitio de Internet especializado en campañas de recaudación de fondos, para solicitar ayuda para el tratamiento y recuperación de su abuelo con la meta inicial de juntar 15 mil dólares.

La meta fue superada en pocas horas y para la tarde de este martes, más de siete mil 500 personas habían contribuido un total de 211 mil 932 dólares.

El realizaba su paseo diario por la manzana cuando fue asaltado por una mujer afroamericana y otros cinco muchachos. Le está yendo muy mal, tiene muchos moretones en la cara y un pómulo roto», escribió Mendoza en la página de GoFundMe.

Mendoza, dijo en una de las múltiples entrevistas que ha concedido a los medios de comunicación tras el ataque, que su abuelo es originario del estado mexicano de Michoacán y había viajado a California para visitar a su familia en Willowbrook.

El nieto relató que su abuelo acostumbra a hacer este viaje aproximadamente dos veces al año y cuando se encuentra de visita suele dar un paseo por el vecindario todos los días después del almuerzo. «Todos en el vecindario ya lo conocen», dijo Mendoza.

Postrado en una cama reclinable en la casa de la familia, vistiendo una camiseta blanca y un pijama azul a cuadros, Rodríguez ha estado concediendo entrevistas en español a medios de comunicación en Los Ángeles.

Rodríguez relató a la estación de televisión KTLA que caminaba hacia un parque cercano el pasado miércoles cuando pasó junto a una mujer y una niña. Sin previo aviso, la mujer lo agredió, golpeándolo con un bloque de cemento y azuzando a un grupo de hombres para que lo golpearan.

Ni siquiera me tope con su hijita», dijo Rodríguez. «Acababa de pasarla y ella me empujó y me golpeó hasta que terminó».

La policía está buscando a «una sospechosa y entre tres y cuatro sospechosos» en el asalto, dijo el Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles en un comunicado la noche del lunes.

Las autoridades no saben en este momento si se utilizaron armas o cuál podría haber sido el motivo, según el comunicado.

Estamos preocupados, especialmente con el tipo de delito que cometieron», dijo el agente del sheriff D’Angelo Robinson a KTLA. «Hubo lo que parece ser un niño de cuatro años que fue testigo de todo. No podemos tener este tipo de personas así en las calles».

Rodríguez dijo que no recuerda cuándo la mujer recogió el bloque de concreto, pero recuerda que lo golpearon repetidamente.

Misbel Borjas pasaba por el lugar cuando vio a la mujer golpeando repetidamente a Rodríguez en la cabeza con un bloque de concreto.

La oí decir: vuelve a tu país, vuelve a México», le dijo Borjas a la cadena de televisión CNN. «Cuando traté de grabarla en video con mi teléfono celular, ella arrojó el mismo bloque de concreto e intentó golpear mi automóvil».

En un momento dado, la mujer corrió hacia un grupo de hombres cercanos y les dijo que Rodríguez estaba tratando de quitarle a su hija, así que los hombres se unieron a ella y comenzaron a patearlo mientras yacía sangrando en la acera.

Pero eso no es verdad. En los años que he estado vivo, nunca he ofendido a nadie», dijo Rodríguez.