México, D.F.- La mejor exposición de arte maya de los últimos años y una de las más grandes que se ha hecho de arqueología americana llegó a Brasil, para presentarse en el Museo de la Ciudad de São Paulo, conocido coloquialmente como Museo de la Oca.

“Se trata de la mayor de todas las muestras jamás organizadas sobre esta civilización, para ser exhibida de manera inédita, incluso antes que en otras capitales mundiales. Es una exposición esperada con gran expectativa por los brasileños”, expresó Juca Ferreira, secretario de Cultura Municipal de esa metrópoli.

La exposición Mayas. Revelación de un tiempo sin fin, que será inaugurada este 9 de junio y que se espera que sea visitada por miles de personas, arriba “en un momento de celebración y comunión, en torno a la Copa del Mundo, en el que México y Brasil tienen el privilegio de trabajar juntos para traer a São Paulo dicha muestra, que representará una valiosa oportunidad para que paulistanos y visitantes entren en contacto con los conocimientos y contemplen una de las culturas precolombinas más desarrolladas”, destacó Ferreira.

Luego del éxito de esta exposición en la Galería de Palacio Nacional de México, el mismo equipo curatorial preparó este segundo montaje para Brasil con 388 piezas, todas de colecciones mexicanas públicas y privadas, procedentes de los cinco estados del país que integran la región maya: Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Chiapas y Tabasco. Los objetos prehispánicos se exhiben dentro de un área de 800 metros de exhibición, en uno de los museos más representativos de la capital cultural de Brasil.

Mayas. Revelación de un tiempo sin fin es organizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en cooperación con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la Embajada de México en Brasil; así como el Ministerio de Cultura de Brasil y la Prefectura de São Paulo, a través del Museo de la Oca.

La colección maya permanecerá en São Paulo hasta fines de agosto haciendo comunión con “las curvas libres y sensuales” del diseño semicircular del Museo de la Oca, que inspiraron a Oscar Niemeyer (1907 – 2012), el arquitecto más importante de Brasil. El recinto se ubica en el interior del Parque Ibirapuera, el pulmón verde de  “Sampa”, como llaman los brasileños a esta metrópoli, y es uno de los espacios museográficos de Brasil con más prestigio, donde se han presentado importantes muestras internacionales, y al que acuden público joven y familias.

Las piezas están ordenadas temáticamente con el fin de mostrar —además de su valor estético— las formas de vida, la organización sociopolítica, la conciencia histórica, la religiosidad y la cosmovisión de los mayas.

Dentro de las piezas mayas que acompañan destacan cabezas de estuco del rey Pakal, dos ofrendas funerarias descubiertas en Campeche e investigadas reciente por arqueólogos del INAH: una procedente de Balamkú y una más de la isla de Jaina; máscaras mortuorias de jade, entre las que se encuentran las de Calakmul; así como elementos de la tumba de Pakal, los atlantes de Chichén Itzá y un marcador monumental de juego de pelota.

vmp